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El día del pizzero y el pastelero se celebra cada 12 enero anualmente, para resaltar la labor de aquellas personas que se dedican a la elaboración de pizzas o pasteles en todo el mundo.

Tiene su origen, por un reconocimiento a aquellos que elaboran pizzas al estilo italiano de una calidad gastronómica.

La pizza llegó a Argentina a finales del siglo XIX, gracias a los inmigrantes italianos. La comercialización de estos productos comenzó en La Boca, donde muchos inmigrantes tenían sus viviendas.

El sindicato en ese entonces contaba con cerca 40.000 trabajadores y fundado en 1946, decidió desde entonces homenajear a sus trabajadores. Desde ahí, muchas pizzerías y pastelerías realizan descuentos en sus productos, hacen degustaciones o concursos en los pizzeros y pasteleros elaboran nuevas creaciones y las ofrecen al público, ellos califican al mejor y este ganará un premio.

La copa helada es uno de los formatos de presentación del helado más tradicionales de las heladerías. Desde siempre ha sido una de las formas de personalizar la oferta y la especialidad en los establecimientos con terraza o zona de degustación. El helado se suele servir con nata, salsas, fruta natural y otros toppings.

En el pasado las copas fueron un formato menos habitual en las heladerías; sin embargo, en los últimos años parece que tenga más presencia en las heladerías. Hace unos años se puso en tendencia en las pastelerías, por lo que probablemente la influencia de este sector pueda explicar, en parte, que se haya vuelto más frecuente también en heladería. Las copas de helado son el contenedor que puede dignificar el helado para llevar y una interesante vía de comercialización del helado como postre para degustar en casa.

Un helado es un capricho y una delicia cremosa y refrescante y ahora más que en ningún momento del año, con el calor, apetece a todas horas. Si su sabor es delicioso, ¿Por qué no empezar a desearlo solo por la vista? Te contamos cómo presentarlo, a través de diferentes accesorios, para triunfar y otros trucos fresquitos que te van a fascinar.

¿Sabor tradicional o innovación?

Hay quienes prefieren los helados de sabores tradicionales (fresa, vainilla, chocolate, leche, merengada) y otros que se atreven con los más innovadores. Los hay incluso en la versión dulce y fría de platos salados. Para gustos, en esta ocasión, los sabores. Los helados deben servirse siempre a una temperatura adecuada para que estén cremosos y se pueda meter la cuchara. Para conseguir ese efecto, lo ideal es sacar del congelador el helado y ponerlo en el frigorífico antes de servirlo. Puedes calcular que por cada kilo de helado deberá permanecer 3 minutos en la nevera.